En estos días, mientras estando de paseo con mi familia en Boyacá, oí en la clásica e infaltable música de paseo en nuestro país (la música colombiana: bambucos, pasillos y demás), un par de canciones: una a la que no le había parado muchas bolas: "El campesino embejuca'o" y "A quien engañas abuelo", que me gusta mucho, pero, para ser franca, no había analizado la letra y, me dí cuenta que por más que conozcamos nuestra historia, parece que estamos destinados a repetirla.
Les voy a poner la letra de ambas para que ustedes mismos saquen conclusiones.
El Campesino Embejucao (Oscar Humberto Gómez Gómez)
Me tienen arrecho con tanta juepuerca preguntadera
que qué color tiene mi bandera
que si yo soy godo o soy liberal
Me tienen verraco con tanta juepuerca averiguadera
que si soy ELNo, EPLo o siquiera
apoyo a las AUC o si soy de las FARC
Me tienen mamao con tanta juepuerca interrogadera
que si yo a la tropa le abro la cerca
y si le doy el agua de mi manantial
Que si soy comunista, de Anapo, de izquierda, o de la derecha
que si imperialista que joda arrecha resulta querer vivir uno en paz
Yo soy campesino trabajador, pobre y muy honrao
Vivía muy alegre pero me tienen embejucao
Pues miren señores a todos ustedes yo les contesto
y quiero que quede muy claro esto
yo no soy de naide, hago el bien, no el mal
Trabajo en el surco desde que el gallo me anuncia el día
y sólo consigo pa’ mi familia
poquitas sonrisas y aún menos pan
Aquí naide viene sino cuando tienen las elecciones
llegan a joder que con los colores y con los doctores
que el cambio harán
Yo soy hombre del campo o mejor dicho soy campesino
así que les ruego, suplico y pido
ya no más preguntas, no me jodan más
Yo soy campesino trabajador, pobre y muy honrao
Vivía muy alegre pero me tienen embejucao.
(letra tomada de http://www.flakito.net/site/es/?page_id=7)
Y ahora, la otra:
A quien engañas abuelo (Arnulfo Briceño)
A quién engañas abuelo?
yo sé que tú estas llorando
ende que taita y que mama
arriba están descansando;
nunca me dijiste cómo,
tampoco me has dicho cuándo,
pero en el cerro hay dos cruces que te lo están recordando.
Bajó la cabeza el viejo y acariciando al muchacho,
dice tienes razón hijo,
el odio todo ha cambiado,
los piones se jueron lejos y el surco está abandonao
a mí ya me faltan juerzas,
me pesa tanto el arao y tú eres tan sólo un niño
pa'sacar arriba el rancho.
Si si me dice Chucho el arriero
el que vive en los cañales,
Que a unos los matan por godos, y a otros por liberales,
pero eso qué importa abuelo,
entonces qué es lo que vale,
mis taitas eran tan guenos,
a naide le hicieron males,
sólo una cosa comprendo que ante Dios somos iguales.
Se aparecen en elecciones unos que llaman caudillos,
que andan prometiendo escuelas
y puentes donde no hay ríos,
y al alma del campesino llega el color partidizo,
y entonces aprende a odiar
hasta a quien fue su buen vecino,
todo por esos malditos politiqueros de oficio.
Ahora te comprendo abuelo,
por Dios no sigas llorando.
(La letra de ésta salió de http://www.todacolombia.com/folclor/musica/canciones/aquien.html)
No hay comentarios:
Publicar un comentario